Setembre 2025. El drama de los incendios: pueblos que arden y vidas que se apagan
Este mes de agosto hemos pasado unos días con nuestros familiares en las tierras de Zamora, El Bierzo y Galicia. La realidad que hemos encontrado ha sido desoladora: pueblos enteros arrasados por las llamas, personas mayores que lo han perdido absolutamente todo y otras familias que, además de sus hogares, han visto desaparecer sus negocios y sus explotaciones ganaderas. Los incendios no solo destruyen casas y bosques, sino también proyectos de vida y la esperanza de muchas comunidades rurales. Hemos intentado colaborar en lo que estaba en nuestras manos, pero regresamos con una tristeza enorme al ver cómo tantos pueblos necesitarán años para recuperarse, si es que algún día lo logran. Algunos de ellos, lamentablemente, podrían desaparecer sin dejar más rastro que el recuerdo de lo que fueron. No quiero olvidarme de otras comunidades autónomas que sufren la misma tragedia que Galicia o Castilla y León. A todos ellos, a quienes hoy luchan contra el fuego y a quienes mañana tendrán que luchar por reconstruir su vida, les enviamos nuestro ánimo y nuestra fuerza. Es urgente que se tomen medidas más eficaces de prevención y apoyo, porque no hablamos solo de árboles quemados, sino de un patrimonio humano y cultural que no podemos permitirnos perder.